Ahora eres un abrazo roto, sangras en los corazones de los que te nos has ido,
porque no es la partida lo que duele, es la falta futura de creacción,
abierto ahora nuestro pecho, como las venas de américa latina,
y con la ironía de los grandes creadores de arte, es en tu muerte
cuando más vives, destapando el tarro del pensamiento a muchos
que aun han de descubrirte, a ti, a tu tacto, a tus ideas, a tu cercanía,
a tu compromiso, a tus espejos, a tus venas abiertas, a tus abrazos rotos,
a tu américa latina. a tus dudas llenas de certezas, a tu solidaridad
que dignifica y hace pueblo, a la orilla de tu obra, a el mar
de tu conocimiento, a la vida que darás donde hayas ido,
si es que alguna vez que vas, porque los eternos tienen la buena
costumbre de dejar vida antes de partir, y hay vida color y luz
para siglos con lo escrito.
No eras bueno para los adioses decías, esto ni siquiera es un hasta luego,
es un "así eres y serás", sin despedidas, sin tintes negros, aunque hoy
te nos atravieses en párpados y gargantas, estas que hoy están taponadas
por tu partida, darán buena cuenta de la vida que aún has de alumbrar, compañero.
Eterno como el comandante más vivo ahora que nunca, porque los grandes genios
como vosotros no podéis morir jamás, solo pasar de cuerpo, y ahora estás en miles
de ojos que se llenan de tu vida, esa que hoy se apagó para ti, pero que se enciende
para miles que aún han de ver la belleza que reflejas como un espejo que jamás podrá
romperse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario